Dra. Figueroa fortalece la IA chilena con colaboración internacional.
Desde pequeña, la Dra. Carola Andrea Figueroa Flores sintió curiosidad por la tecnología y la resolución de problemas. Su interés por la informática la llevó a estudiar Ingeniería Civil en Informática en la Universidad del Bío-Bío, y posteriormente a especializarse en inteligencia artificial. «Siempre me ha interesado entender cómo funcionan las cosas y cómo podemos mejorarlas con tecnología», comenta.
Recientemente, Figueroa realizó una pasantía en Barcelona gracias al apoyo del Doctorado en Inteligencia Artificial (DIA), a través del proyecto FIC de la Región del Biobío, y de la Universidad del Bío-Bío. Durante su estadía, trabajó en el Instituto de Investigación en IA – CSIC, el Centro de Visión por Computador (CVC-UAB), el Instituto de Ciencias de la Vid y el Vino (ICVV) de la Universidad de La Rioja y la Facultad de Matemáticas e Informática de la Universidad de Barcelona. «Fue una experiencia intensa y enriquecedora, donde tuve la oportunidad de colaborar con investigadores de distintos países y compartir visiones sobre el futuro de la IA», relata.
Esta estancia le permitió avanzar en diversas líneas de trabajo, como IA explicable (XAI), modelos de argumentación y razonamiento no monótono en sistemas inteligentes, visión por computador aplicada a la detección de enfermedades en la vid, visión médica, bioinformática estructural, machine learning cuántico y ética en IA. «Allá están trabajando en problemas que aún ni siquiera se han planteado en Chile», comenta. Uno de los aspectos más llamativos fue la diferencia en el enfoque: «Mientras nosotros estamos tratando de implementar herramientas, ellos están diseñando la próxima generación de tecnologías.»
Además de participar en investigaciones, Figueroa impartió seminarios en el ICVV y el grupo Artificial Intelligence and Biomedical Applications (AIBA-UB), compartiendo avances en IA aplicada a imágenes médicas y agroindustria. «Fue una gran oportunidad para fortalecer redes académicas y generar nuevas colaboraciones en investigación y co-tutelas de tesis», señaló.
La docente destaca que Chile tiene mucho potencial en el desarrollo de inteligencia artificial, pero reconoce que aún hay brechas significativas en comparación con Europa y Estados Unidos. «No es que falte talento, sino que necesitamos más inversión en investigación y mejor conexión entre la academia y la industria», menciona. En Barcelona, pudo ver cómo distintas instituciones trabajan de manera integrada para desarrollar tecnología de punta con aplicación directa en la sociedad. «Allá hay una mentalidad de crear y mejorar, mientras que aquí muchas veces nos limitamos a adaptar tecnologías externas».
La docente hizo un llamado a los jóvenes interesados en la inteligencia artificial a que se atrevan a explorar y desarrollar nuevas ideas. «La IA no es solo para expertos en computación; es un área multidisciplinaria donde todas las miradas son necesarias», asegura. Además, enfatiza la importancia de generar redes de #colaboración dentro y fuera del país. «La clave está en compartir conocimientos y trabajar en conjunto. No podemos quedarnos solo como consumidores de tecnología; debemos ser parte de su desarrollo. No hay que tener miedo a equivocarse o a no saberlo todo. En la IA, la clave es #aprender, #adaptarse y #colaborar con otros. Es una disciplina que cambia rápido, y quienes se atrevan a innovar van a marcar la diferencia», finalizó.